Los Chakras

En algunos de mis artículos te menciono mucho la palabra chakra y es que todo nuestro cuerpo humano está correlacionado con ellos, así que te explicaré en detalle qué son, cuáles  y dónde se encuentran.

Hace más de 2.000 años, en dos Upanishad Hinduistas (libros sagrados hinduistas escritos en sánscrito) se recoge la existencia de 7 puntos de energía repartidos en el cuerpo humano. Estos puntos de energía, se conocen con la palabra Chakra, que  significa círculo en sánscrito y canalizan la energía del cosmos a través de nuestro cuerpo, alineándose con distintos aspectos de nuestra vida y cada uno maneja una energía particular que transmite al resto del cuerpo.

Es muy importante mantenerlos en equilibrio para mantener una buena salud física y mental; a continuación, te explicaré los chakras uno a uno.

“Mantener estos hábitos de forma regular es clave para lograr el equilibrio general de los chakras y promover el bienestar físico, emocional y espiritual.”

Ms Lautrec –  Medellin, Colombia

Chakra 1: Muladhara (color: rojo)

Su nombre significa “raíz” o “soporte” y se ubica en la base de la columna, entre el ano y los genitales.

Muladhara es el centro energético que conecta con la tierra y donde reside el anhelo material de supervivencia. Este chakra influye en los aspectos terrenales y se vincula con la seguridad física y las necesidades básicas, además, nos conecta con la salud, la higiene, el hogar, los alimentos, el dinero y los bienes materiales. Piedras asociadas: rubí, coral rojo, granate y jaspe rojo.

Chakra 2: Svadhisthana (color: anaranjado)

El significado de su nombre es “la propia morada” y se ubica en el coxis, dos dedos debajo del ombligo. Es la sede del despertar o renacer de la consciencia e incita a la búsqueda de relaciones significativas. Svadhisthan está directamente asociado a la sexualidad, sensualidad, el placer y el erotismo; y es el primer paso en el sendero que lleva al ser humano más allá de lo estrictamente material. Piedras asociadas: ámbar y ágata cornalina.

Chakra 3: Manipura (color: amarillo)

Chakra del plexo solar, es el chakra del sol, de la luz y de la abundancia y es el centro de energía vital más importante del ser humano.

En él residen la voluntad, el poder y las emociones. Se ubica en el punto medio entre el ombligo y la boca del estómago. Piedras asociadas: cuarzo citrino y ojo de tigre.

Chakra 4: Anahatha (color: verde)

Chakra del corazón, se ubica en la región dorsal detrás del corazón. Anahatha corresponde a la energía del centro del pecho y canaliza el nacimiento de la iluminación o el entendimiento superior espiritual.

Se vincula a la compasión, la empatía, la ternura y la solidaridad; y además al deseo de unidad emocional y afectiva. Piedras asociadas: Esmeralda, prehnita, cuarzo verde y olivino.

Chakra 5: Vishudda (color: azul)
Está constituido como la puerta de la bienaventuranza y de la gran liberación. Vishudda es el chakra laríngeo y se ubica detrás de la garganta.

Es el centro de la creatividad y de la comunicación en todos sus aspectos ya que desde allí es posible conectarse con la divinidad o cualquier otra forma de lo trascendente. Su nombre significa “el grande” o “el puro”.  Piedras asociadas: Turquesa, angelita, calcedonia y topacio azul.

Chakra 6: Ajña (color: índigo)

Es el chakra del tercer ojo y se ubica entre las cejas.

Su nombre significa “centro de mando” o “el que dirige”. 

Ajña es el núcleo de la lógica y de la comprensión verdadera de la realidad; es el motor de búsqueda del amor espiritual y de la sabiduría auténtica. También se lo vincula a la concentración, la imaginación, la fantasía, la inspiración y la visión interior. Piedras asociadas: Lapislázuli, sodalita, iolita y zafiro.

 
 

Chakra 7: Sahasrara (color: morado)

Se trata del chakra de la corona y es el que tiene la energía más elevada, ya que se encuentra fuera del cuerpo físico, en un centro magnético encima de la coronilla. Piedras asociadas: Amatista, diamante y cuarzo cristal de roca.

Al llegar a este séptimo y último chakra, es cuando Kundalini (link para artículo Kundalini) finaliza su camino y la dualidad vuelve a la unidad, creando una superconsciencia o trascendencia del alma que está más allá de las coordenadas espaciales y temporales.

Es en este punto donde se verifica un proceso de unificación entre la personalidad humana y el Yo más elevado. Es el sitio de la inspiración, la iluminación, la consciencia cósmica y la realización final.

Así que te puedes estar preguntando; ¿cómo puedo equilibrar los chakras diariamente?

Te voy a dar algunas pautas que puedes seguir.

  • Meditación y visualización: dedica un tiempo prudente de tu día a meditar y visualizar energía positiva fluyendo libremente a través de tus chakras. Imagina cada chakra irradiando su color característico y siente cómo se equilibran y fortalecen.
  • Cristales y piedras semipreciosas: lleva contigo o pon cristales y/o piedras semipreciosas relacionados con cada chakra en tus espacios sagrados.
  • Aromaterapia: usa aceites esenciales con fragancias que correspondan a cada chakra durante tus prácticas de meditación, masajes o baños. Por ejemplo, el sándalo o el cedro son excelentes para el chakra raíz, mientras que la lavanda o el jazmín pueden ser beneficiosos para el chakra del tercer ojo.
  • Yoga: incorpora posturas de yoga que se centren en cada chakra para estimular su energía y promover su equilibrio.
  • La naturaleza: pasar tiempo al aire libre o en la naturaleza puede ser muy relajante, refrescante e inspirador. Esto puede ayudar a equilibrar el chakra raíz, que se relaciona con la conexión con la tierra.

Mantener estos hábitos de forma regular es clave para lograr el equilibrio general de los chakras y promover el bienestar físico, emocional y espiritual.

Mss Lautrec pero… y ¿cómo se cuando mis chakras están en desequilibrio?

Muy bien, algunos signos de que un chakra puede estar desequilibrado incluyen:

  • Problemas de salud relacionados con esa área del cuerpo, como dolores, tensión o bloqueos
  • Emociones intensas o inestabilidad emocional asociada a ese chakra
  • Dificultad para expresar o procesar sentimientos relacionados con ese chakra
  • Patrones de comportamiento repetitivos o bloqueos en esa área de tu vida

Por ejemplo, un desequilibrio en el chakra raíz puede manifestarse como fatiga crónica, problemas digestivos o dificultad para establecer límites saludables. Un desequilibrio en el chakra del corazón puede causar problemas de autoestima, dificultad para perdonar o relaciones inestables.

Para identificar específicamente qué chakras pueden estar desequilibrados, observa en qué áreas de tu vida o cuerpo estás experimentando problemas. Cada chakra está asociado a ciertos aspectos del plano físico:

  • Chakra raíz (rojo): supervivencia, seguridad, enraizamiento
  • Chakra sacro (naranja): creatividad, placer, emociones
  • Chakra solar (amarillo): poder personal, autoestima, propósito
  • Chakra del corazón (verde): amor, compasión, perdón
  • Chakra de la garganta (azul): comunicación, expresión, autenticidad
  • Chakra del tercer ojo (índigo): intuición, visión, sabiduría
  • Chakra corona (morado): conexión espiritual, trascendencia

Observa en qué áreas de tu vida o qué áreas de tu cuerpo estás experimentando problemas y compara con los aspectos asociados a cada chakra. Así sabrás qué centros de energía pueden necesitar equilibrio y atención.

XOXO Ms Lautrec.

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Valentina Gomez Acosta

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